Ep 51 4) La Ley del Minimo Esfuerzo
Hoy continuamos con la cuarta de las 7 Leyes Espirituales del Éxito, según el libro del mismo nombre escrito por Deepak Chopra. Ya vimos la 1) Pura Potencialidad, 2) Dar y Recibir y 3) Karma. En este episodio revisaremos la cuarta, que es La Ley del Mínimo Esfuerzo.
Esta ley se basa en el hecho de que la inteligencia de la naturaleza funciona con facilidad, sin esfuerzo, es el principio de acción mínima, de no resistencia. Es el principio de la armonía y el amor. Cuando aprendemos esta lección de la naturaleza, podemos satisfacer fácilmente nuestros deseos.
Si observas cómo trabaja la naturaleza, te darás cuenta de que se utiliza el mínimo esfuerzo posible. El pasto no trata de crecer, sencillamente crece. Los peces no tratan de nadar, simplemente nadan. Las flores no tratan de florecer, florecen. Los pájaros no tratan de volar, vuelan. Esto es su naturaleza intrínseca. La tierra no trata de girar sobre su eje; es la naturaleza de la tierra girar y trasladarse por el espacio. Es la naturaleza de los bebés vivir en la dicha. Es la naturaleza del sol brillar. Es la naturaleza de las estrellas centellear y resplandecer. Y es la naturaleza humana hacer que nuestros sueños se manifiesten en forma física, fácilmente y sin esfuerzo.
En la ciencia védica, la antigua filosofía de la India, este principio se conoce como el principio de economía de esfuerzo, o “haz menos y logra más”. Finalmente se llega al estado en el que no haces nada y logras todo. Esto significa que sólo hay una débil idea, y luego la manifestación física de la idea llega sin esfuerzo. Lo que comúnmente se toma por un “milagro” es en realidad la expresíón de la Ley del Mínimo Esfuerzo.
La inteligencia de la naturaleza funciona sin esfuerzo, sin fricción, espontáneamente. Es no-lineal, intuitiva, holística, y nutriente.y cuando estás en armonía con la naturaleza, puedes hacer uso de la Ley del Mínimo Esfuerzo.
El mínimo esfuerzo es gastado cuando tus acciones están motivadas por el amor, porque la naturaleza es sostenida por la energía del amor. Cuando buscas poder y control sobre otras personas, malgastas energía. Cuando buscas dinero o poder para satisfacer a tu ego, estás gastando energía en la búsqueda de la ilusión de la felicidad, en lugar de disfrutar la felicidad en el momento. Cuando buscas dinero sólo para tu ganancia personal, cortas el flujo de energía hacia ti mismo, e interfieres con la expresión de la inteligencia de la naturaleza. Cuando tus acciones son motivadas por el amor, tu energía se multiplica y acumula – y este exceso de energía que generas se puede canalizar para crear cualquier cosa que quieras, incluyendo riquezas ilimitadas.
Puedes pensar en tu cuerpo físico como un dispositivo para controlar energía: puede generar, almacenar y gastar energía. Si aprendes a hacer esto de una manera eficiente, entonces puedes crear cualquier cantidad de riquezas. La atención al ego consume la mayor cantidad de energía. Cuando tu punto de referencia interno es el ego, cuando buscas poder y control sobre otras personas o buscas aprobación de otros, estás derrochando tu energía.
Cuando esta energía es liberada, puede ser recanalizada y usada para crear cualquier cosa que desees. Cuando tu punto de referencia interno es tu espíritu, cuando eres inmune a la crítica y no le temes a ningún desafío, puedes canalizar el poder del amor y usar la energía creativamente para crear una experiencia de abundancia y evolución.
En El Arte de Soñar, Don Juan le dice a Caros Castañeda, “… la mayor parte de nuestra energía se gasta en defender nuestra importancia… si fuéramos capaces de perder algo de esa importancia, dos cosas extraordinarias nos pasarían: una, liberaríamos a nuestra energía de tratar de mantener la ilusión de nuestra grandeza; y dos, nos proporcionaríamos a nosotros mismos energía suficiente para atisbar un poco de la verdadera grandeza del universo.”
La Ley del Mínimo Esfuerzo tiene tres componentes – tres cosas que puedes hacer para poner en acción el principio de “haz menos y logra más”. El primer componente es la aceptación, que simplemente significa que hagas un compromiso: “Hoy aceptaré a la gente, situaciones, circunstancias, y eventos tal como ocurran”. Esto significa que sabré que este momento es tal como debe ser, porque el universo entero es tal como debe ser. Este momento – el que estás viviendo ahora, justo en este momento – es la culminación de todos los momentos que has experimentando en el pasado. Este momento es como es porque el universo entero es como es.
Cuando luchas contra este momento, estas luchando en realidad contra el universo entero. En vez, puedes tomar la decisión de que hoy no vas a luchar contra el universo luchando contra este momento. Esto significa que tu aceptación de este momento es total y completa. Aceptas las cosas tal como son, no como tu quisieras que fueran en este momento. Es importante entender bien esto. Puedes desear que las cosas sean diferentes en el futuro, pero en este momento tienes que aceptar las cosas como son.
Cuando te sientes frustrad@ por una persona o situación, recuerdo que no estás reaccionando a la persona o situación, sino que a tus sentimientos hacia la persona o situación. Estos son tus sentimientos, y por lo tanto no son culpa o responsabilidad de otros. Cuando reconoces y comprendes esto completamente, estas list@ para hacerte responsable de cómo te sientes y cambiarlo. Y si puedes aceptar las cosas coo son, estas list@ para hacerte responsable de tu situación de todos los eventos que ves como problemas.
Esto nos lleva a la segunda componente de la Ley del Mínimo Esfuerzo: responsabilidad. Qué significa esto? No culpar a nadie ni a nada por tu situación, incluyéndote a ti mism@. Habiendo aceptado esta circunstancia, este evento, este problema, responsabilidad significa la capacidad de tener una respuesta creativa a la situación tal como es ahora. Todo problema contiene la semilla de oportunidad, y esta consciencia hace que tomes el momento y lo transformes en una situación o cosa mejor.
Una vez que haces esto, cada situación que consideres molesta se convertirá en una oportunidad para la creación de algo nuevo y hermoso, cada torturador o tirano se transformará en tu maestro. La realidad es una interpretación, y si eliges interpretar la realidad de esta manera, tendrás muchos maestrosa tu alrededor y muchas oportunidades para evolucionar.
Cada vez que te confrontes con un tirano, tortura, maestro, amigo o enemigo (todos significan lo mismo) recuerda, “Este momento es tal como debe ser”. Cualquier relación que hayas atraído a tu vida en este momento es precisamente lo que necesitas en tu vida en este momento. Hay un significado oculto detrás de todo evento, y este es servir a tu propia evolución.
El tercer componente de la Ley del Mínimo Esfuerzo es vulnerabilidad, que significa que tu consciencia es establecida en vulnerabilidad, y que has renunciado a la necesidad de convencer o persuadir a otros de tu punto de vista. Si observas a las personas a tu alrededor, verás que gastan el 90% de su tiempo defendiendo sus puntos de vista. Si simplemente renuncias a la necesidad de defender el tuyo, ganarás acceso a cantidades enormes de energía que de otra manera se estaría perdiendo.
Cuando te pones a la defensiva, culpas a otros, y no aceptas ni te rindes al momento, tu vida se encuentra con resistencia. Cada vez que encuentres resistencia, reconoce que si fuerzas la situación la resistencia sólo aumentará. No quieres estar rígido como un roble alto que se quiebra y colapsa en la tormenta. Por el contrario, quieres ser flexible, como los juncos que se doblan en la tormenta y sobreviven.
Desiste completamente de defender tu punto de vista. Cuando no tienes un punto de vista que defender, no permites que nazca una discusión. Si haces esto consistentemente – si dejas de pelear y resistir – vas a experimentar completamente en l presente, que es un regalo. Alguien una vez me dijo, “el pasado es historia, el futuro es un misterio, y este momento es un regalo. Por eso a este momento se le llama ‘el presente’.”
Si aceptas el presente y te haces uno con él, y te fundes con él, experimentarás un fuego, un resplandor, un brillo de éxtasis pulsando en cada ser viviente. Cuando comienzas a experimentar esta euforia del espíritu en todas las cosas vivientes, la dicha nacerá dentro de ti, y te despojarás de las terribles cargas de estar a la defensiva, del resentimiento y del dolor. Solo entonces te harás alegre, despreocupad@, feliz, y libre.
En esta libertad simple y alegre, sabrás sin ninguna duda en tu corazón de que lo que deseas está disponible para ti en cualquier momento que lo desees, porque tu deseo será desde el nivel de la felicidad, no desde el nivel de la ansiedad y el miedo. No necesitas justificarlo, simplemente declara tu intención y experimentarás satisfacción, gozo, felicidad, libertad, y autonomía en cada momento de tu vida.
Haz un compromiso de seguir el camino de no resistencia, que es el camino a través del cual la inteligencia de la naturaleza se despliega espontáneamente, sin fricción ni esfuerzo. Cuando logras esta exquisita combinación de aceptación, responsabilidad y vulnerabilidad, experimentaras el flujo de la vida con facilidad y sin esfuerzo.
Cuando te mantienes abiert@ a todos los puntos de vista – no adhiriéndote rígidamente a sólo uno – tus sueños y deseos fluirán con la naturaleza. Entonces puedes soltar tus intenciones, sin apego, y simplemente esperar el momento apropiado para que tus deseos se hagan realidad. Puedes estar segur@ de que cuando el momento sea el correcto, tus deseos se manifestarán. Esta es la Ley del Mínimo Esfuerzo.
Para poner en práctica la Ley del Karma, Deepak Chopra nos recomienda los siguientes pasos:
1) Practicaré la Aceptación. Hoy aceptaré a la gente, situaciones, circunstancias, y eventos tal como ocurran”. Sabré que este momento es tal como debe ser, porque el universo entero es tal como debe ser. No lucharé contra todo el universo luchando contra este momento. Mi aceptación es total y completa. Acepto las cosas como son en este momento, no como yo quisiera que fueran.
2) Habiendo aceptado las cosas como son, tomaré Responsabilidad por mi situación y por todos los eventos que veo como problemas. Se que asumir mi responsabilidad significa no culpar a nada ni nadie por mi situación (esto me incluye a mí mism@). También sé que cada problema es una oportunidad disfrazada, y que estar alerta a la oportunidad me permite tomar este momento y transformarlo en un mayor beneficio.
3) Hoy mi consciencia se mantendrá vulnerable. Renunciaré a la necesidad de defender mi punto de vista. No sentiré necesidad de convencer o persuadir a otros de aceptar mi punto de vista. Me mantendré abiert@ a todos los puntos de vista y no me apegaré a ninguno de ellos.
Esta ley está muy relacionada con el Ep anterior, número 50, “Bienvenido al Mundo, Bienvenido a la Vida!” asi que no me voy a extender en mis comentarios, además que ya está bastante largo y no quiero abusar de tu tiempo.
Sólo me quiero quedar con las ideas de aceptación, responsabilidad y vulnerabilidad, para que las tengas presentes en todo momento.
La próxima ley es la número 5, Ley de Intención y Deseo.
Por ahora me despido con un abrazo, hasta la próxima y buen viaje!!!
Esta ley se basa en el hecho de que la inteligencia de la naturaleza funciona con facilidad, sin esfuerzo, es el principio de acción mínima, de no resistencia. Es el principio de la armonía y el amor. Cuando aprendemos esta lección de la naturaleza, podemos satisfacer fácilmente nuestros deseos.
Si observas cómo trabaja la naturaleza, te darás cuenta de que se utiliza el mínimo esfuerzo posible. El pasto no trata de crecer, sencillamente crece. Los peces no tratan de nadar, simplemente nadan. Las flores no tratan de florecer, florecen. Los pájaros no tratan de volar, vuelan. Esto es su naturaleza intrínseca. La tierra no trata de girar sobre su eje; es la naturaleza de la tierra girar y trasladarse por el espacio. Es la naturaleza de los bebés vivir en la dicha. Es la naturaleza del sol brillar. Es la naturaleza de las estrellas centellear y resplandecer. Y es la naturaleza humana hacer que nuestros sueños se manifiesten en forma física, fácilmente y sin esfuerzo.
En la ciencia védica, la antigua filosofía de la India, este principio se conoce como el principio de economía de esfuerzo, o “haz menos y logra más”. Finalmente se llega al estado en el que no haces nada y logras todo. Esto significa que sólo hay una débil idea, y luego la manifestación física de la idea llega sin esfuerzo. Lo que comúnmente se toma por un “milagro” es en realidad la expresíón de la Ley del Mínimo Esfuerzo.
La inteligencia de la naturaleza funciona sin esfuerzo, sin fricción, espontáneamente. Es no-lineal, intuitiva, holística, y nutriente.y cuando estás en armonía con la naturaleza, puedes hacer uso de la Ley del Mínimo Esfuerzo.
El mínimo esfuerzo es gastado cuando tus acciones están motivadas por el amor, porque la naturaleza es sostenida por la energía del amor. Cuando buscas poder y control sobre otras personas, malgastas energía. Cuando buscas dinero o poder para satisfacer a tu ego, estás gastando energía en la búsqueda de la ilusión de la felicidad, en lugar de disfrutar la felicidad en el momento. Cuando buscas dinero sólo para tu ganancia personal, cortas el flujo de energía hacia ti mismo, e interfieres con la expresión de la inteligencia de la naturaleza. Cuando tus acciones son motivadas por el amor, tu energía se multiplica y acumula – y este exceso de energía que generas se puede canalizar para crear cualquier cosa que quieras, incluyendo riquezas ilimitadas.
Puedes pensar en tu cuerpo físico como un dispositivo para controlar energía: puede generar, almacenar y gastar energía. Si aprendes a hacer esto de una manera eficiente, entonces puedes crear cualquier cantidad de riquezas. La atención al ego consume la mayor cantidad de energía. Cuando tu punto de referencia interno es el ego, cuando buscas poder y control sobre otras personas o buscas aprobación de otros, estás derrochando tu energía.
Cuando esta energía es liberada, puede ser recanalizada y usada para crear cualquier cosa que desees. Cuando tu punto de referencia interno es tu espíritu, cuando eres inmune a la crítica y no le temes a ningún desafío, puedes canalizar el poder del amor y usar la energía creativamente para crear una experiencia de abundancia y evolución.
En El Arte de Soñar, Don Juan le dice a Caros Castañeda, “… la mayor parte de nuestra energía se gasta en defender nuestra importancia… si fuéramos capaces de perder algo de esa importancia, dos cosas extraordinarias nos pasarían: una, liberaríamos a nuestra energía de tratar de mantener la ilusión de nuestra grandeza; y dos, nos proporcionaríamos a nosotros mismos energía suficiente para atisbar un poco de la verdadera grandeza del universo.”
La Ley del Mínimo Esfuerzo tiene tres componentes – tres cosas que puedes hacer para poner en acción el principio de “haz menos y logra más”. El primer componente es la aceptación, que simplemente significa que hagas un compromiso: “Hoy aceptaré a la gente, situaciones, circunstancias, y eventos tal como ocurran”. Esto significa que sabré que este momento es tal como debe ser, porque el universo entero es tal como debe ser. Este momento – el que estás viviendo ahora, justo en este momento – es la culminación de todos los momentos que has experimentando en el pasado. Este momento es como es porque el universo entero es como es.
Cuando luchas contra este momento, estas luchando en realidad contra el universo entero. En vez, puedes tomar la decisión de que hoy no vas a luchar contra el universo luchando contra este momento. Esto significa que tu aceptación de este momento es total y completa. Aceptas las cosas tal como son, no como tu quisieras que fueran en este momento. Es importante entender bien esto. Puedes desear que las cosas sean diferentes en el futuro, pero en este momento tienes que aceptar las cosas como son.
Cuando te sientes frustrad@ por una persona o situación, recuerdo que no estás reaccionando a la persona o situación, sino que a tus sentimientos hacia la persona o situación. Estos son tus sentimientos, y por lo tanto no son culpa o responsabilidad de otros. Cuando reconoces y comprendes esto completamente, estas list@ para hacerte responsable de cómo te sientes y cambiarlo. Y si puedes aceptar las cosas coo son, estas list@ para hacerte responsable de tu situación de todos los eventos que ves como problemas.
Esto nos lleva a la segunda componente de la Ley del Mínimo Esfuerzo: responsabilidad. Qué significa esto? No culpar a nadie ni a nada por tu situación, incluyéndote a ti mism@. Habiendo aceptado esta circunstancia, este evento, este problema, responsabilidad significa la capacidad de tener una respuesta creativa a la situación tal como es ahora. Todo problema contiene la semilla de oportunidad, y esta consciencia hace que tomes el momento y lo transformes en una situación o cosa mejor.
Una vez que haces esto, cada situación que consideres molesta se convertirá en una oportunidad para la creación de algo nuevo y hermoso, cada torturador o tirano se transformará en tu maestro. La realidad es una interpretación, y si eliges interpretar la realidad de esta manera, tendrás muchos maestrosa tu alrededor y muchas oportunidades para evolucionar.
Cada vez que te confrontes con un tirano, tortura, maestro, amigo o enemigo (todos significan lo mismo) recuerda, “Este momento es tal como debe ser”. Cualquier relación que hayas atraído a tu vida en este momento es precisamente lo que necesitas en tu vida en este momento. Hay un significado oculto detrás de todo evento, y este es servir a tu propia evolución.
El tercer componente de la Ley del Mínimo Esfuerzo es vulnerabilidad, que significa que tu consciencia es establecida en vulnerabilidad, y que has renunciado a la necesidad de convencer o persuadir a otros de tu punto de vista. Si observas a las personas a tu alrededor, verás que gastan el 90% de su tiempo defendiendo sus puntos de vista. Si simplemente renuncias a la necesidad de defender el tuyo, ganarás acceso a cantidades enormes de energía que de otra manera se estaría perdiendo.
Cuando te pones a la defensiva, culpas a otros, y no aceptas ni te rindes al momento, tu vida se encuentra con resistencia. Cada vez que encuentres resistencia, reconoce que si fuerzas la situación la resistencia sólo aumentará. No quieres estar rígido como un roble alto que se quiebra y colapsa en la tormenta. Por el contrario, quieres ser flexible, como los juncos que se doblan en la tormenta y sobreviven.
Desiste completamente de defender tu punto de vista. Cuando no tienes un punto de vista que defender, no permites que nazca una discusión. Si haces esto consistentemente – si dejas de pelear y resistir – vas a experimentar completamente en l presente, que es un regalo. Alguien una vez me dijo, “el pasado es historia, el futuro es un misterio, y este momento es un regalo. Por eso a este momento se le llama ‘el presente’.”
Si aceptas el presente y te haces uno con él, y te fundes con él, experimentarás un fuego, un resplandor, un brillo de éxtasis pulsando en cada ser viviente. Cuando comienzas a experimentar esta euforia del espíritu en todas las cosas vivientes, la dicha nacerá dentro de ti, y te despojarás de las terribles cargas de estar a la defensiva, del resentimiento y del dolor. Solo entonces te harás alegre, despreocupad@, feliz, y libre.
En esta libertad simple y alegre, sabrás sin ninguna duda en tu corazón de que lo que deseas está disponible para ti en cualquier momento que lo desees, porque tu deseo será desde el nivel de la felicidad, no desde el nivel de la ansiedad y el miedo. No necesitas justificarlo, simplemente declara tu intención y experimentarás satisfacción, gozo, felicidad, libertad, y autonomía en cada momento de tu vida.
Haz un compromiso de seguir el camino de no resistencia, que es el camino a través del cual la inteligencia de la naturaleza se despliega espontáneamente, sin fricción ni esfuerzo. Cuando logras esta exquisita combinación de aceptación, responsabilidad y vulnerabilidad, experimentaras el flujo de la vida con facilidad y sin esfuerzo.
Cuando te mantienes abiert@ a todos los puntos de vista – no adhiriéndote rígidamente a sólo uno – tus sueños y deseos fluirán con la naturaleza. Entonces puedes soltar tus intenciones, sin apego, y simplemente esperar el momento apropiado para que tus deseos se hagan realidad. Puedes estar segur@ de que cuando el momento sea el correcto, tus deseos se manifestarán. Esta es la Ley del Mínimo Esfuerzo.
Para poner en práctica la Ley del Karma, Deepak Chopra nos recomienda los siguientes pasos:
1) Practicaré la Aceptación. Hoy aceptaré a la gente, situaciones, circunstancias, y eventos tal como ocurran”. Sabré que este momento es tal como debe ser, porque el universo entero es tal como debe ser. No lucharé contra todo el universo luchando contra este momento. Mi aceptación es total y completa. Acepto las cosas como son en este momento, no como yo quisiera que fueran.
2) Habiendo aceptado las cosas como son, tomaré Responsabilidad por mi situación y por todos los eventos que veo como problemas. Se que asumir mi responsabilidad significa no culpar a nada ni nadie por mi situación (esto me incluye a mí mism@). También sé que cada problema es una oportunidad disfrazada, y que estar alerta a la oportunidad me permite tomar este momento y transformarlo en un mayor beneficio.
3) Hoy mi consciencia se mantendrá vulnerable. Renunciaré a la necesidad de defender mi punto de vista. No sentiré necesidad de convencer o persuadir a otros de aceptar mi punto de vista. Me mantendré abiert@ a todos los puntos de vista y no me apegaré a ninguno de ellos.
Esta ley está muy relacionada con el Ep anterior, número 50, “Bienvenido al Mundo, Bienvenido a la Vida!” asi que no me voy a extender en mis comentarios, además que ya está bastante largo y no quiero abusar de tu tiempo.
Sólo me quiero quedar con las ideas de aceptación, responsabilidad y vulnerabilidad, para que las tengas presentes en todo momento.
La próxima ley es la número 5, Ley de Intención y Deseo.
Por ahora me despido con un abrazo, hasta la próxima y buen viaje!!!
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