Ep 19: Aprender a poner límites (Parte 2)

Nuevamente les quiero recordar que el link directo al podcast es carolafuertes.hipcast.com/rss/larutadelavida.xml, o lo pueden encontrar en iTunes bajo el nombre La Ruta de la Vida o bajo mi nombre. Tambien está disponible el mail larutadelavida@gmail.com.

En el episodio de hoy vamos a continuar con el tema del miércoles pasado, que era aprender a poner límites, y esta oportunidad quiero comentar ideas que tal vez se aplican más directamente a las relaciones de pareja, pero que igual se pueden aplicar a cualquier tipo de relación: Integridad (completitud), Equilibrio (balance) y Espacio (entre nosotros).
En el episodio anterior hablamos de Relaciones, Dependencia y Posesividad. Me llegaron algunos comentarios de que había sido un poco fuerte el tema, y les pido disculpas si lo sintieron así. Pero la verdad es que estoy convencida de que no podemos vivir la vida que soñamos, si no somos capaces de construir relaciones sanas en todos los ámbitos de nuestra vida. Necesitamos empezar a revisar cuanto antes las relaciones en las que podamos estar manifestando alguno de estos comportamientos para que las podamos sanar y podamos disfrutarlas el resto de nuestras vidas.
Vuelvo a mencionar que no sé si lo que voy a hacer acá es legal en términos de derecho de autor, pero voy a cumplir mi compromiso de compartir con ustedes lo encuentre útil, así que voy a leerles igual algunos pasajes de este librito traducidos por mí. De todos modos cité la fuente así al menos estoy acreditando al autor original.

Partamos por la Integridad, en el sentido de Completitud: qué dice Veronica Ray al respecto: “Integridad: Probablemente hemos escuchado a alguien referirse a su esposa, esposo o pareja como “mi otra mitad”, o “mi media naranja”, o “mi mejor mitad”.

Con frecuencia nos referimos a una pareja como “Carlos y Patricia”, como si fuera un sólo nombre, o “los Gómez”, incluso si estamos hablando de sólo 1 de ellos. Podemos decir por ejemplo, “Me deben dinero” cuando es solo Carlos quien te lo pidió prestado. O podemos asumir que si uno es Republicano, fanático del fútbol, o vegetariano, ambos lo son. Podríamos considerar que estas son etiquetas y suposiciones inocentes, pero pueden crear y reforzar imágenes de nosotros mismos como si fuéramos menos completos o íntegros individualmente. Nuestras percepciones y autoimagen pueden estar basadas en ser la mitad de una relación más que en ser los seres únicos que somos. Recordar nuestra integridad como individuos nos ayudará a evitar la dependencia en nuestras relaciones. Nuestra salud, felicidad, y espiritualidad no dependen de nadie más que nosotros mismos.”
Tal vez puedes pensar que es un detalle la forma que tenemos de referirnos a otras parejas, pero yo creo que es importante reconocer la individualidad de cada persona, así como para nosotros no es bueno asumir ni que se nos atribuya la identidad de nuestra pareja. Pero no NECESITAMOS tomar prestada la identidad de nadie, es importante mantener la identidad propia aún siendo parte de una pareja. A veces nos sentimos halagados de cierta manera cuando alguien nos dice que nos necesita, o que no puede vivir sin nosotros, que somos todo para ellos. Podemos pensar que es romántico. Pero no es sano. Aquí es cuando se comienzan a generar las codependencias. Somos todos seres completos y únicos y en verdad no NECESITAMOS a nadie más que a nuestros padres para haber nacido, pero de ahí en adelante sólo debemos enfocarnos en construir relaciones sanas con otra gente.
Vamos con el Equilibrio o Balance: “Balance: una relación buena, sana, requiere equilibrar tiempo juntos y tiempo cada uno solo por separado, dependencia e independencia, dar y recibir, decir sí y decir no. Esto no significa que todo esta cuidadosamente dividido justo en el medio. No llevamos un registro de las horas que pasamos juntos, o el número de veces que hacemos o recibimos favores, o las maneras en que somos dependientes e independientes. Pero el desequilibrio en estas áreas puede hacernos sentir una incomodidad que señala la necesidad de encontrar un mejor equilibrio. Este equilibrio es dar generosamente, sabiendo que hay suficiente para nosotros también.

Es recibir sin culpa, y decir que sí porque sabemos que también podríamos decir no. Es confianza en que la relación no será dañada por pasar tiempo separados o por diferencias de opinión. Es disfrutar de la marea baja, con la seguridad de que la marea alta volverá a venir.”
No podemos vivir con la ilusión de que en una relación, en especial de pareja van a ser todos momentos felices. Tampoco podemos esperar que la otra persona va a actuar siempre como nosotros queremos, no es justo, y en realidad si lo piensas, es una locura!!! Porque a veces incluso esperamos que la otra persona ADIVINE lo que queremos! Y nos enojamos si no lo hace! Se tiene que dar un balance entre lo que damos y lo que recibimos, en lo que esperamos y en lo que esperan de nosotros, no necesariamente justo en el medio, pero sí ambas partes se tienen que sentir tratadas con justicia.
Vamos con el tercer tema, Espacio, entre nosotros: “En una relación saludable, aceptamos que cada uno de nosotros tiene pensamientos, sentimientos, intereses y puntos de vista únicos. No nos sentimos amenazados por las diferencias, porque respetamos, confiamos y honramos al otro. Nuestra relación no depende de que renunciemos a nosotros mismos. Puede ser que compartamos muchas actividades, intereses y creencias. Puede ser que estemos de acuerdo en muchos temas y decisiones. Pero de todos modos tenemos la libertar de estar en desacuerdo, de tener intereses diferentes y dedicarles tiempo, y de seguir creciendo y cambiando en nuestra propia manera. Nuestro crecimiento personal contribuye a la profundización y el fortalecimiento de la relación. Conectarse, unirse a otro es una hermosa experiencia humana cuando es compartida por dos personas completas, íntegras en sí mismas. El espacio entremedio no es una manada de leones lista para devorarnos. Es un río que está en continuo fluir, sobre el que podemos construir un puente de confianza, respeto y amor.”
Creo que suena bastante obvia esta parte, pero me encantó la última parte. El espacio entre nosotros es un río que está en continuo fluir, sobre el que podemos construir un puente de confianza, respeto y amor. Todos necesitamos espacio, aire, amigos diferentes, somos individuos, no un bloque. El mensaje que te quiero dejar hoy es, no necesitas a nadie, no quiero decir que tengas que irte a vivir solo al campo, pero queiro decir que estas completo solo tal como eres; busca el equilibrio en tu relación, y valor y cultiva el espacio necesario para que cada uno tenga y cultive su individualidad.

•Ahora los dejo hasta la próxima, buen fin de semana, pasenlo bien y como siempre buen viaje!