La Ruta de la Vida

Este blog acompaña al podcast La Ruta de la Vida, que fue creado para compartir experiencias y aprendizajes que nos regala el camino que es la vida. Puedes encontrar el podcast en iTunes o en http://www.blubrry.com/larutadelavida

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viernes, 24 de septiembre de 2010

Ep 73: Los Cuatro Acuerdos – La Domesticación y el Sueño del Planeta

La semana pasada comenzamos una serie sobre el libro “Los Cuatro Acuerdos” y en la primera parte vimos la introducción del libro “El Espejo Humeante”, ese fue el episodio 71 por si no lo has escuchado. “Los Cuatro Acuerdos” de Don Miguel Ruiz, un libro de la Sabiduría Tolteca. En esta oportunidad veremos una síntesis del primer capítulo que se llama “La Domesticación y el Sueño del Planeta”. Acá vamos.

Lo que ves y escuchas ahora mismo no es más que un sueño. En este mismo momento estás soñando. Sueñas con el cerebro despierto. Antes de que naciésemos, aquellos que nos precedieron crearon un enorme sueño externo que llamaremos el sueño de la sociedad o el sueño del planeta, que es el sueño colectivo hecho de miles de millones de sueños más pequeños, de sueños personales que, unidos, crean un sueño de una familia, un sueño de una comunidad, un sueño de una ciudad, un sueño de un país, y finalmente, un sueño de toda la humanidad. El sueño del planeta incluye todas las reglas de la sociedad, sus creencias, sus leyes, sus religiones, sus diferentes culturas y maneras de ser, sus gobiernos, sus escuelas, sus acontecimientos sociales y sus celebraciones.-> con esto se refiere a una interpretación de la realidad.

Los seres humanos que nos preceden (mamá, papá, la escuela y la religión) nos enseñan a soñar de la forma en que lo hace la sociedad, por medio de la repetición, introdujeron información en nuestra mente. -> nos enseñaron su interpretación, la “cultura”.

Así es como aprendimos todo lo que sabemos. Aprendimos cómo comportarnos en sociedad: qué creer y qué no creer; qué es aceptable y qué no lo es; qué es bueno y qué es  malo; qué es bello y qué es feo; qué es correcto y qué es incorrecto, incluso el idioma que hablamos. El lenguaje es el código que utilizamos los seres humanos para comprendernos y comunicarnos. Cada letra, cada palabra de cada idioma, es un acuerdo.

Tú no escogiste tu lengua, ni tu religión ni tus valores morales: ya estaban ahí antes de que nacieras. Nunca escogimos ni el más insignificante de estos acuerdos. Ni siquiera elegimos nuestro propio nombre.

De niños no tuvimos la oportunidad de escoger nuestras creencias, pero estuvimos de acuerdo con la información que otros seres humanos nos transmitieron del sueño del planeta. La única forma de almacenar información es por acuerdo. El sueño externo capta nuestra atención, pero si no estamos de acuerdo, no almacenaremos esa información. Tan pronto como estamos de acuerdo con algo, nos lo creemos, y a eso lo llamamos «fe». Tener fe es creer incondicionalmente.-> el concepto de acuerdo, es la aceptación que hacemos de  lo que aprendimos, que es la interpretación de nuestra cultura sobre la existencia, mundo, vida, etc.

Llamo a este proceso «la domesticación de los seres humanos», y a través de ella aprendemos a vivir y a soñar. Día a día, en casa, en la escuela, en la iglesia y desde la televisión, nos dicen cómo hemos de vivir, qué tipo de comportamiento es aceptable, cómo ser seres humanos. Tenemos todo un concepto de lo que es una «mujer» y de lo que es un «hombre». Y también aprendemos a juzgar: Nos juzgamos a nosotros mismos, juzgamos a otras personas, juzgamos a nuestros vecinos... -> la interpretación cultural que heredamos nos enseña a juzgar.

Adiestramos a nuestros niños, de la misma forma en que adiestramos a cualquier animal doméstico: con un sistema de premios y castigos. Nos decían: «Eres un niño bueno», o: «Eres una niña buena», cuando hacíamos lo que mamá y papá querían que hiciéramos. Cuando no lo hacíamos, éramos «una niña mala» o «un niño malo».

Pronto empezamos a tener miedo de ser castigados y también de no recibir la recompensa, es decir, la atención de nuestros padres o de otras personas como hermanos, profesores y amigos. Con el tiempo desarrollamos la necesidad de captar la atención de los demás para conseguir nuestra recompensa. Debido a ese miedo a ser castigados y a no recibir la recompensa, empezamos a actuar, a fingir que éramos lo que no éramos, con el único fin de complacer a los demás, de ser lo bastante buenos para otras personas. Fingimos ser lo que no éramos porque nos daba miedo que nos rechazaran y este miedo se convirtió en el miedo a no ser lo bastante buenos.

Al final, acabamos siendo alguien que no éramos. Nos convertimos en una copia de las creencias de mamá, las creencias de papá, las creencias de la sociedad y las creencias de la religión.->para encajar en nuestra cultura, nos adaptamos a su sueño, a su interpretación.

La domesticación es tan poderosa que, en un determinado momento de nuestra vida, ya no necesitamos que nadie nos domestique. Somos unos animales  autodomesticados. Nos castigamos a nosotros mismos cuando no seguimos las reglas de nuestro sistema de creencias; nos premiamos cuando somos «un niño bueno» o «una niña buena». -> nos autocensuramos con lo que ya sabemos que la sociedad espera de nosotros.

Nuestro sistema de creencias es como el Libro de la Ley que gobierna nuestra mente y dirige nuestro sueño. Basamos todos nuestros juicios en él, aún cuando vayan en contra de nuestra propia naturaleza interior.

Tenemos un Juez interior utiliza lo que está en nuestro Libro de la Ley para juzgar todo lo que hacemos y dejamos de hacer, todo lo que pensamos y no pensamos, todo lo que sentimos y no sentimos, incluso el clima, el perro, el gato... Todo. Cada vez que hacemos algo  que va contra el Libro de la Ley, el Juez dice que somos culpables, que necesitamos un castigo, que debemos sentirnos avergonzados. Esto ocurre muchas veces al día, día tras día, durante todos los años de nuestra vida.

Hay otra parte en nosotros que recibe los juicios, y a esa parte la llamamos «la Víctima». La Víctima carga con la culpa, el reproche y la vergüenza. Y todo esto se fundamenta en un sistema de creencias en el que jamás escogimos creer, pero que es tan fuerte que, incluso años después de haber entrado en contacto con nuevos conceptos y de intentar tomar nuestras propias decisiones, nos damos cuenta de que esas creencias todavía controlan nuestra vida.

Dado que todo lo que está en el Libro de la Ley tiene que ser verdad, cualquier cosa que ponga en tela de juicio lo que creemos, nos hace sentir inseguros, aunque el Libro de la Ley esté equivocado. Por este motivo, necesitamos una gran valentía para desafiar nuestras propias creencias; porque, aunque sepamos que no las escogimos, también es cierto que las aceptamos. El acuerdo es tan fuerte, que incluso cuando sabemos que el concepto es erróneo, sentimos la culpa, el reproche y la vergüenza que aparecen cuando actuamos en contra de esas reglas.

Todas estas leyes existen en nuestra mente, creemos en ellas; el Juez decreta y la Víctima sufre la culpa y el castigo. Pero ¿quién dice que este sueño sea justo? La verdadera justicia consiste en pagar sólo una vez por cada error. Lo que es verdaderamente injusto es pagar varías veces por el mismo error.

El ser humano es el único animal sobre la Tierra que paga miles de veces por el mismo error, porque tenemos una gran memoria. Cometemos una equivocación, nos juzgamos a nosotros mismos, nos declaramos culpables y nos castigamos. Cada vez que lo recordamos, nos juzgamos de nuevo, volvemos a considerarnos culpables y nos volvemos a castigar, una y otra vez. Si estamos casados, también nuestra mujer o nuestro marido nos recuerda el error, y así volvemos a juzgarnos de nuevo, nos castigamos otra vez y nos volvemos a sentir culpables. ¿Acaso es esto justo?

¿Cuántas veces hacemos que nuestra pareja, nuestros hijos o nuestros padres paguen por el mismo error? Cada vez que recordamos el error, los culpamos de nuevo y les enviamos todo el veneno emocional que sentimos frente a la injusticia; hacemos que vuelvan a pagar por ello.

En el sueño del planeta, a los seres humanos les resulta normal sufrir, vivir con miedo y crear dramas emocionales. El sueño externo no es un sueño placentero; es un sueño lleno de violencia, de miedo, de guerra, de injusticia. El sueño personal de los seres humanos varía, pero en conjunto es una pesadilla. Si observamos la sociedad humana, comprobamos que es un lugar en el que resulta muy difícil vivir, porque está gobernado por el miedo, sufrimiento, cólera, venganza, adicciones, violencia en las calles y una tremenda injusticia. Esto existe en diferentes niveles en los distintos países del mundo, pero el miedo controla el sueño externo.

Cada ser humano, hombre o mujer, tiene su sueño personal, que, al igual que ocurre con el sueño de la sociedad, a menudo está dirigido por el miedo. El mismo miedo se manifiesta de distintas maneras en cada persona, por supuesto, porque todos sentimos cólera, celos, odio, envidia y otras emociones negativas. Nuestro sueño personal también puede convertirse en una pesadilla permanente en la que sufrimos y vivimos en un estado de miedo constante. Sin embargo, no es necesario que nuestro sueño sea una pesadilla. Podemos disfrutar de un sueño agradable.

Vamos a dejar hasta acá esta parte, porque son varias las ideas que nos deja el libro y yo creo que es bueno darse un tiempo para reflexionar. Te invito a observar en tu vida, cual es el sueño del planeta en el que vives, es decir, cual es la interpretación colectiva de la realidad en la que te desenvuelves, y cómo te afecta en tu diario vivir, en lo que haces y dejas de hacer, lo que piensas y lo que no piensas, en cómo juzgas a otros, a las circunstancias que te toca vivir y a ti mismo.

Qué acuerdos has adoptado en tu vida? Pueden ser acuerdos de tu familia, de tu comunidad, de tu país, etc. Comienza a recordar, a sentir, con cuales de ellos no estás tan de acuerdo, siéntelo en tu cuerpo. Un ejemplo sencillo: crecí con el acuerdo de que los gatos eran traicioneros. Ahora de grande me hice consciente de ese acuerdo, me incomodaba, ahora me simpatizan bastante los gatos.

Fíjate cuantas veces pagas por tus errores y cuantas veces haces pagar a otros por sus errores.

Sé consciente en cada momento, cual es la emoción que está gobernando tu “sueño”, o tu interpretación de tu ahora, tu interpretación de cada momento. Qué emoción o emociones te gobiernan con más frecuencia? El miedo, la ira, la frustración, la envidia, los celos? O el amor, la generosidad, la alegría, la compasión, la gratitud? Como dice el libro: “…no es necesario que nuestro sueño sea una pesadilla. Podemos disfrutar de un sueño agradable.” es decir, no es necesario que nuestra interpretación de la vida, del ahora, sea negativa, podemos vivir en una interpretación agradable y alegre de la vida, depende de cada uno de nosotros.

Antes de despedirme les recuerdo las vías de comunicación: maillarutadelavida@gmail.com, blog www.larutadelavida.com, o twitter.com/larutadelavida

Ahora me despido, cuidense mucho, un abrazo y buen viaje! 

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lunes, 13 de septiembre de 2010

Ep 72: Cómo Descubrir Cuáles Son Tus Sueños

Vamos con el tema de hoy. Acá en la Ruta el tema central es  la vida de tus sueños, y de tiempo en tiempo, me topo con una situación que no me sorprende tanto, porque hasta hace poco a mí me pasaba mucho, pero que me preocupa, y que es ver que mucha gente no sabe cuales son sus sueños. Mucha gente no sabe que es lo que más le gustaría hacer en la vida, o no se atreve a expresarlo, o no cree que tenga el derecho siquiera de tener esa aspiración.
Y me preocupa por varias razones. Una es porque si uno no sabe lo que quiere hacer, si uno no sabe que es lo que le gusta, si uno no sabe cuales son sus sueños, cuales creen que son las probabilidades de que lo logren? Casi 0. Otra razón es porque mucha gente ha llegado a creer que no tiene derecho, o que no tiene sentido, o que “no se puede”, incluso antes de empezar a soñar!!! O tal vez cuando niños tenían sueños y por alguna razón los tuvieron que reprimir y ya olvidaron que los tenían. Eso a mi me parece muy triste.
Y finalmente tb me preocupa, porque mientras más gente esté viviendo y realizando sus sueños, más feliz es cada uno individualmente, por lo tanto más feliz es nuestro entorno y más felices somos todos. Es un círculo virtuoso.
Como lo he dicho antes, yo creo que es un deber de todos explotar nuestros talentos y realizar nuestros sueños y ayudar a otros a explotar sus talentos y realizar sus sueños. A continuación vamos a repasar un método muy fácil para descubrir cuales son nuestros sueños, qué nos apasiona y por lo tanto donde deberíamos enfocar nuestras energías.
Bueno, yo no sé si ustedes ubican a Steve Pavlina, él es uno de los nombres que más suenan en el mundo del desarrollo personal y es el autor del libro “Personal Development for Smart People”, que aun no lo he leido asi que todavía no lo puedo comentar. Su esposa Erin tiene escribe en el blog “Spiritual Wisdom for Concious People” en www.erinpavlina.com y su último post está muy relacionado con el tema de hoy, se llama “How to find and ignite your passion”, “Como encontrar y encender tu pasión”. En el blog de la Ruta voy a poner un link a este artículo en el blog de Erin para los que quieran leerlo, en verdad se los recomiendo ya que acá vamos a comentar sólo un extracto.
Bueno, toma una hoja de papel, o abre un documento en Word para que tomes notas y siguas las instrucciones. Son 4 preguntas que te van a dar muchas luces sobre tus sueños y pasiones , acá va el método que propone Erin:

1) Qué hace que te vuelvas loco de entusiasmo?
Piensa en todas las cosas en la vida que te encanta hacer. Esquiar, leer, escalar, socializar, ir a fiestas, hacer videos y subirlos a YouTube, jugar póker, o meditar tranquilamente por horas. Haz una lista de todas esas cosas que te encantaría hacer si alguien te dijera que te tomaras el día libre en el trabajo para hacer lo que quisieras. “Patricia, porqué no faltas al trabajo mañana y te dedicas a _______?”. Completa la oración con una lista de las cosas que te gustaría hacer en lugar de ir a trabajar.
No importa si te parece irrelevante o una pérdida de tiempo. Un amigo se vuelve loco con los videojuegos. Es un jugador, nada más que eso. No hay nada más que el preferiría hacer. Fue a la universidad y estudió computación pensando que era una buena opción de carrera para él, pero en realidad no le gustaba.Ahora trabaja como testeador de juegos y juega todo el día. Ascendió muy rápido y es muy apreciado porque da excelente feedback constructivo para mejorar los juegos. Si sigue así podria crear su propio juego en un tiempo más o integrar el equipo de diseño.
Una vez que tengas la lista de cosas que te entusiasman, considera de qué manera podrías hacer la transición a una carrera que te permita hacer eso todo el tiempo. Piensa bien y se creativo. No tienes que renunciar a tu trabajo hoy, pero comienza a pensar de qué maneras hay otras personas que están ganando dinero haciendo eso que tu amas, y ve si puedes encontrar la manera de insertarte en esas áreas.

2) Qué te rompe el corazón?
Cuando miras a tu alrededor, ves sufrimiento? Ves cosas que están mal y que te encantaría ver que se solucionaran? Qué te rompe el corazón? La desnutrición o el abuso infantil? La gente que no tiene casa? La política? La guerra y los conflictos mundiales? Lo que te rompe el corazón es una pista para encontrar tu pasión. Si tu creyeras que realmente tienes la posibilidad de hacer una diferencia en el mundo, en qué te enfocarías? Qué problema atacarías? Nadie dice que tengas que acabar con el hambre en el mundo de la noche a la mañana. Simplemente mira en tu corazón y ve que dolores tienes guardados ahí.
Haz una lista de todo lo que realmente te rompe el corazón, de aquellas cosas que realmente tocan tu corazón y que te provocan emociones y reacciones fuertes. Una vez que tengas la lista, ve si puedes tomar acción sobre esas cosas. No tiene que ser necesariamente algo que puedas cambiar por tu actual trabajo ahora, puede ser algo que comiences a hacer en paralelo, y que te ayuda a ganar experiencia, y quien sabe, más adelante alguna oferta de trabajo.

3) Qué harías si supieras que no vas a fallar?
Lo más común que dice la gente que sabe cuales son sus sueños, pero que no está haciendo nada para realizarlos es: “No sé como hacerlo”.  Nadie sabe cómo hacerlo cuando recién están empezando. No saber cómo hacer algo no es una razón suficientemente buena para no hacerlo. Puedes aprender. O encontrar a alguien que lo esté haciendo con éxito y aprender cómo lo han hecho, o simplemente vas por tu propio camino de prueba y error hasta que encuentres una manera.
En tu hoja de papel, escribe la frase: “si supiera que no voy a fallar yo………….” y a continuación haz una lista de todo lo que harías. Piensa grande. El cielo es el límite.
Ahora piensa en todas las maneras en que podrías llevar a cabo lo que está en tu lista, no hay una sola única manera de lograr las cosas. Por ejemplo, si en tu lista estuviera “ayudar y enseñar a la gente a alimentarse de manera sana y con consciencia ecológica”, cómo podrías lograr esto? Podrías crear un blog o un podcast, organizar talleres en tu comunidad, acercarte a los colegios, escribir un libro, etc. Mientras te mantengas en sintonía con tu sueño, la manera de lograrlo es tu decisión. Que podrías hacer con tu lista? Haz una lista con todas las carreras, trabajos o actividades con las que podrías llevar a cabo lo que está en tu lista de las cosas que harías si supieras que no vas a fallar.

4) Qué te hace sentir qué has contribuido?
Otra forma de descubrir qué te apasiona es completar la siguiente oración: “Al final del día, me siento bien conmigo misma cuando he_______”. Te sientes bien contigo cuando has resuelto algún problema, ayudado a alguien que sufre, hecho un cambio en tu vida, o en la de otra persona, cuando te has desafiado a ti mismo, cuando has organizado un área, cocinado una comida rica para tu familia, cuando te has dado tiempo para tí mismo, para meditar? Que te hace sentir esa satisfacción y ese sentimiento de un trabajo bien hecho? Podrías hacer eso para ganarte la vida? Es muy probable que sí puedas, o al menos hacer algo relacionado.
Tu pasión, tus sueños, están en ti, en algún lugar en tu interior. Recuérdalos o encuéntralos. Luego toma acción. Tu puedes hacerlo! Cuando combinas la pasión con el talento y la contribución, el éxito no tarda en llegar. No sigas haciendo algo que odias, comienza a buscar en ti y descubre lo que te hace feliz. Es tu derecho y tu deber!

Les recuerdo las vías de comunicación: mail larutadelavida@gmail.com, esteblog www.larutadelavida.com, o twitter.com/larutadelavida 
Ahora me despido, cuidense mucho, recuerden sus sueños, un abrazo y buen viaje! 

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martes, 15 de diciembre de 2009

Ep 71: Los Cuatro Acuerdos – Un Libro de la Sabiduría Tolteca – El Espejo Humeante

Hace un tiempo tuvimos una serie donde revisamos y analizamos una a una las leyes del libro de Deepak Chopra, Las Siete Leyes Espirituales del Éxito, y fue una serie que tuvo una muy buena recepción por parte de ustedes. Hay tantos libros interesantes y por lo general no tenemos mucho tiempo, por lo que me imagino que esa fue la razón de que fuera bien recibido. Así que en esta misión de hacerles la vida más fácil a ustedes y de compartir también las cosas que yo encuentro que me sirven a mí, vamos a hacer una serie sobre el libre “Los Cuatro Acuerdos” de Don Miguel Ruiz, un libro de la Sabiduría Tolteca. El esquema va a similar al que usamos para el otro libro, es decir, este primer episodio va a ser una introducción y luego haremos eso de un episodio o más por capítulo del libro (que son 9) y finalmente si amerita, hacemos uno de conclusiones. Uno de los episodios de la semana va a ser sobre el libro y el otro de otro tema libre para mantener la variedad. Espero que les parezca bien.
Bueno, para quienes no han escuchado de ellos, los Toltecas son los aborígenes precolombinos que habitaban la zona central y norte de México. No quiero entrar en mucho detalle, porque hay bastante controversia sobre este pueblo y de seguro muchos de los auditores saben mejor los detalles de esta cultura, pero lo quiero enfocarme, es en el libro. Si alguien quiere hacer alguna aclaración, por favor les pido que lo hagan en el blog más que por mail directo a mi, ya que de esa manera, queda disponible para que todos puedan verlo.

El libro también parte con una explicación de quienes son los toltecas, y aquí vamos:
Hace miles de años los Toltecas eran conocidos en todo el sur de México como «mujeres y hombres de conocimiento». Los antropólogos han definido a los toltecas como una nación o una raza, pero de hecho, eran científicos y artistas que formaron una sociedad para estudiar y conservar el conocimiento espiritual y las prácticas de sus antepasados. Formaron una comunidad de maestros (naguales) y estudiantes en Teotihuacán, la ciudad de las pirámides en las afueras de Ciudad de México, conocida como el lugar en el que «el hombre se convierte en Dios».
A lo largo de los milenios los naguales se vieron forzados a esconder su sabiduría ancestral y a mantener su existencia en secreto. La conquista europea, unida a un agresivo mal uso del poder personal por parte de algunos aprendices, hizo necesario proteger el  conocimiento de aquellos que no estaban preparados para utilizarlo con buen juicio o que hubieran podido usarlo malintencionadamente para obtener un beneficio personal.
Por fortuna, el conocimiento esotérico tolteca fue conservado y transmitido de una generación a otra por distintos linajes de naguales. Aunque permaneció oculto en el secreto durante cientos de años, las antiguas profecías vaticinaban que llegaría el momento en el que seria necesario devolver la sabiduría a la gente. Ahora, don Miguel Ruiz, un nagual del linaje de los Guerreros del Águila, ha sido guiado para divulgar las poderosas enseñanzas de los toltecas.
El conocimiento tolteca surge de la misma unidad esencial de la verdad de la que parten todas las tradiciones esotéricas sagradas del mundo. Aunque no es una religión, respeta a todos los maestros espirituales que han enseñado en la tierra, y si bien abarca el espíritu, resulta más preciso describirlo como una manera de vivir que se distingue por su fácil acceso a la felicidad y el amor.
Ahora vamos con la introducción: El Espejo Humeante
Hace tres mil años había un ser humano, igual que tú y que yo, que vivía cerca de una ciudad rodeada de montañas. Este ser humano estudiaba para convertirse en un chamán, para aprender el conocimiento de sus ancestros, pero no estaba totalmente de acuerdo con todo lo que aprendía. En su corazón sentía que debía de haber algo más.

Un día, mientras dormía en una cueva, soñó que veía su propio cuerpo durmiendo. Salió de la cueva a una noche de luna llena. El cielo estaba despejado y vio una infinidad de estrellas. Entonces, algo sucedió en su interior que transformó su vida para siempre. Se miró las manos, sintió su cuerpo y oyó su propia voz que decía: «Estoy hecho de luz; estoy hecho de estrellas».
Miró al cielo de nuevo y se dio cuenta de que no son las estrellas las que crean la luz, sino que es la luz la que crea las estrellas. «Todo está hecho de luz –dijo–, y el espacio de en medio no está vacío.» Y supo que todo lo que existe es un ser viviente, y que la luz es la mensajera de la vida, porque está viva y contiene toda la información.
Entonces se dio cuenta de que, aunque estaba hecho de estrellas, él no era esas estrellas. «Estoy en medio de las estrellas», pensó. Así que llamó a las estrellas el tonal y a la luz que había entre las estrellas el nagual, y supo que lo que creaba la armonía y el espacio entre ambos es la Vida o Intento. Sin Vida, el tonal y el nagual no existirían. La Vida es la fuerza de lo absoluto, lo supremo, la Creadora de todas las cosas.
Esto es lo que descubrió: todo lo que existe es una manifestación del ser viviente al que llamamos Dios; todas las cosas son Dios. Y llegó a la conclusión de que la percepción humana es sólo luz que percibe luz. También se dio cuenta de que la materia es un espejo –todo es un espejo que refleja luz y crea imágenes de esa luz–, y el mundo de la ilusión, el Sueño, es tan sólo como un humo que nos impide ver lo que realmente somos. «Lo que realmente somos es puro amor, pura luz», dijo.
Este descubrimiento cambió su vida. Una vez que supo lo que en verdad era, miró a su alrededor y vio a otros seres humanos y al resto de la naturaleza, y le asombró lo que vio. Se vio a sí mismo en todas las cosas: en cada ser humano, en cada animal, en cada árbol, en el agua, en la lluvia, en las nubes, en la Tierra... Y vio que la Vida mezclaba el tonal y el nagual de distintas maneras para crear millones de manifestaciones de Vida.
En esos instantes lo comprendió todo. Se sentía entusiasmado y su corazón rebosaba paz. Estaba impaciente por revelar a su gente lo que había descubierto. Pero no había palabras para explicarlo. Intentó describirlo a los demás, pero no lo entendían. Vieron que había cambiado, que algo muy bello irradiaba de sus ojos y de su voz. Comprobaron que ya no emitía juicios sobre nada ni nadie. Ya no se parecía a nadie.

El los comprendía muy bien a todos, pero a él nadie lo comprendía. Creyeron que era una encarnación de Dios; al oírlo, él sonrió y dijo: «Es cierto. Soy Dios. Pero vosotros también lo sois. Todos somos iguales. Somos imágenes de luz. Somos Dios». Pero la gente seguía sin entenderlo.
Había descubierto que era un espejo para los demás, un espejo en el que podía verse a sí mismo. «Cada uno es un espejo», dijo. Se veía en todos, pero nadie se veía a sí mismo en él. Y comprendió que todos soñaban pero sin tener consciencia de ello, sin saber lo que realmente eran. No podían verse a ellos mismos en él porque había un muro de niebla o humo entre los espejos. Y ese muro de niebla estaba construido por la interpretación de las imágenes de luz: el Sueño de los seres humanos.
Entonces supo que pronto olvidaría todo lo que había aprendido. Quería acordarse de todas las visiones que había tenido, así que decidió llamarse a sí mismo «Espejo Humeante» para recordar siempre que la materia es un espejo y que el humo que hay en medio es lo que nos impide saber qué somos. Y dijo: «Soy Espejo Humeante porque me veo en todos vosotros, pero no nos reconocemos mutuamente por el humo que hay entre nosotros. Ese humo es el Sueño, y el espejo eres tú, el soñador».
Bueno, llegamos al final de esta primera parte de la serie que acabamos de comenzar sobre el libro Los Cuatro Acuerdos, de Don Miguel Ruiz. Espero que les haya gustado y que se queden con la inquietud de verse en los demás, en todo lo que les rodea. Para mí eso ha sido bien transformador, trato de verme en todos los demás, sentir que somos lo mismo. Esto me ha servido en muchos aspectos, por ejemplo, si discuto o me enojo con alguien y recuerdo que yo soy el o ella, que tal vez en alguna ocasión yo podria haber hecho o dicho lo mismo, me cuesta mucho más seguir enojada. Yo creo que realmente todos somos uno. La alegría y la pena de otros tb es mi alegría y mi pena, y mi deseo es generar bienestar y alegría para otros, y de esa manera generar alegría y bienestar para mí. Al dar a otros eso que yo quiero,  también lo recibo yo.
Antes de despedirme les recuerdo las vías de comunicación: mail larutadelavida@gmail.com, blog www.larutadelavida.com, o twitter.com/larutadelavida
La música de este podcast se llama sunshine y es de kevin mcleod.
Ahora me despido, cuidense mucho, un abrazo y buen viaje!


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lunes, 7 de diciembre de 2009

Ep 70: Cómo Convivir con Gente “Difícil”

La verdad es que me cuesta un poco hacer el tema de hoy, se los digo honestamente. Pero creo que es importante entender cuando estamos viviendo una situación así, y también a protegernos y sobrellevarlo de la mejor manera.
Cuando hablo de gente "difícil", me refiero a aquellas personas que tienen una influencia negativa en nuestras vidas.
Una de las razones por las que me costó hacer este episodio es por que no me siento 100% cómoda asignándole al otro la dificultad, ya saben que acá en La Ruta somos más bien de la idea de tomar responsabilidad por la situación en la que estamos y jamás plantearnos como víctimas.
Y por lo mismo es importante reconocer cuando tenemos a nuestro alrededor a personas que no tienen una influencia positiva en nuestras vidas. Lo que estoy tratando de decir, es que puede ser que esas personas no sean difíciles en sí mismas, pero en nuestra relación con ellas sentimos que no nos aportan nada positivo y muchas veces resulta todo lo contrario incluso.
Puede ser cualquier persona, un jefe, un amigo o amiga, un pariente, hermanos, mama, papa, compañero de trabajo, etc. Pero cómo los reconocemos? Lo importante es que para reconocerlos, no los miramos a ellos, sino que nos miramos a nosotros mismos.
Te ha pasado que después de estar con alguien te sientes agotado? Sin energía, cansado? O tal vez, habiendo tenido un estado de ánimo absolutamente normal para ti, positivo, optimista, como siempre, te encuentras con alguien y luego de conversar un rato, te sientes pesimista, triste, deprimido? O que estás súper entusiasmado con un proyecto nuevo, y después de contárselo a alguien, te sientes desanimado, inseguro, dudoso?
Como decíamos, la gente “difícil” es la que tiene influencia negativa en nosotros. Y quiero volver a insistir en que no se trata de echarles la culpa, o tomarnoslo en forma personal, o dudar de su cariño por nosotros, o pensar que tienen malas intenciones. Muchas veces puede ser lo contrario. Por ejemplo, una mamá o un papá aprehensivos, pueden tener una influencia negativa en un hijo, no dejándolo explorar sus deseos, sus sueños, sus proyectos, por un afán de protegerlo, de evitarle sufrimiento, que en el fondo nace del cariño que tienen por su hijo.
El primer paso es identificarlos. Quienes son esas personas que en vez de elevarte, te bajan? Que te dejan agotado, exhausto, triste, inseguro, deprimido? Insisto que para reconocerlas, no te fijes que lo que ellos dicen o hacen. Puede haber gente que tu te des cuenta que en general hablan bastantes cosas negativas, pero que no tienen influencia en ti. Tú no les has dado el poder para que te influyan, y cuando mucho te dan pena por ellas; en esas personas no nos vamos a enfocar. Para identificarlas obsérvate a ti mismo durante los próximos días cuando interactúes con otros.
Una vez que los has identificado, qué hacer? Esto va a sonar duro, pero mi sugerencia es que en todos los casos posibles te alejes de ellos. Si es un compañero de trabajo, que durante la hora de almuerzo no hace más que quejarse de su vida, de su trabajo, de su familia, de sus vecinos, etc.. Que te deja con la sensación de que te hubiese pasado una aplanadora por encima, evita almorzar con el. Si es una amiga o un amigo que te busca sólo cuando necesita desahogarse y echar afuera todos sus problemas, pero no es una situación mutua, comienza a alejarte, pon tus límites, cuídate a ti mismo! Si es alguien que cada vez que estas feliz o entusiasmado con algo, se las arregla para bajarte, para demostrarte que no puedes o que no sirve, para hacerte sentir inseguro, o incluso para ridiculizarte… aléjate de esa persona! Cada vez que puedas, aléjate! No tienes por qué exponerte a ese tipo de influencias si no es necesario o totalmente inevitable.
Claro que hay veces en que no puedes alejarte. Si esta persona que tiene una influencia negativa en tu vida es alguien cercano, un familiar, padre, madre, hijos, esposo, esposa, un amigo muy cercano, alguien que está muy ligado a ti, o de quien tu sientes que no te puedes alejar, como un jefe, necesitamos una estrategia diferente.
El foco acá no es tratar de cambiar a la otra persona, eso nunca lo debemos intentar, ni esperar, y yo personalmente no creo que sea posible, ni deseable, ni justo. Lo que buscamos es cambiar la dinámica de la relación y la manera en que nos afecta.
Lo primero que podemos hacer es conversar con la otra persona, partiendo de la base del cariño que los une y pedirle lo que necesitemos. Por ejemplo, voy a compartir algo súper personal acá. A mí me pasaba con mi papá que el solía contarme mucho sobre sus problemas, de trabajo, con mi mamá, con mis hermanos, de todo tipo. Por alguna razón, yo me sentía en parte responsable de su felicidad y sufría mucho porque no podía solucionar sus problemas. El claramente no lo hacía para hacerme daño, pero esa dinámica tenía una influencia negativa en mí, me dejaba angustiada y deprimida. Entonces al mismo tiempo que comencé a trabajar esa creencia de que su felicidad era mi responsabilidad, que claramente era errónea, le pedí que no me contara tanto sus problemas y que me contara más de sus alegrías.
Podemos pedirle a alguien que cuando les contemos sobre nuestros sueños y nuestros proyectos, no nos digan solo lo que creen que puede salir mal, sino que también nos digan lo que creen que puede salir bien, y lo que ellos piensan que son nuestras fortalezas para lograr nuestros objetivos. Lo importante es tener estas conversaciones en un contexto de amor y cariño, no en un tono de acusación, de resentimiento o de reclamo. En esta etapa estamos tratando con la gente realmente cercana y por lo tanto es gente que nos quiere y que en realidad desea el bien para nosotros. Pensemos que a veces son sus propios miedos los que hablan, miedo de perdernos, miedo o inseguridad de no poder o no tener la energía ellos mismos de llevar a cabo sus sueños, y esto lo que nos debe inspirar es compasión.
Por otro lado, y finalmente, tenemos que trabajar en nosotros mismos, sobretodo si esta conversación no es posible, o no da los resultados que esperamos, tenemos que trabajar en poner límites a la influencia que estas relaciones tienen sobre nosotros.
Somos nosotros mismos quienes finalmente dejamos que otros tengan influencia sobre nosotros, ya sea buena o mala. La respuesta est a en nosotros, no en el otro.  Esta es la parta más difícil, pero es lo que verdaderamente nos libera, nos sana. Nadie nos puede hacer daño, nadie puede tener influencia negativa en nosotros sin nuestro consentimiento; de la misma manera que nadie nos puede hacer felices si no los dejamos.
La próxima vez que sientas que alguien tiene una influencia negativa en ti, en tu estado de ánimo, en tu bienestar, pregúntate si puedes alejarte de esa persona. Si no puedes o no quieres, prueba conversar con ella, cuéntale lo que te pasa cuando te cuenta sólo desgracias, o cuando te critica y desanima por algún proyecto. Finalmente, y lo más importante de todo, aprende a poner límites a la influencia que tienen otros sobre , comprende de donde viene lo que te dicen, que puede ser del cariño que tienen o de sus propios miedos, y no te lo tomes personal. Recuerda que no importa lo que otros te digan, eres tú quien permite que te influyan de la manera en que lo hacen.
También es importante estar alertas porque podemos estar siendo nosotros quienes tenemos influencia negativa en otros. Obsérvate en tu relación con otros, que les dices a quienes te comentan sus sueños y sus proyectos? Tienes el hábito de descargar todas tus frustraciones, tus problemas, tus desánimos en otros sin preguntarte qué efecto puede estar teniendo eso en ellos? 11:08 Si es así, ten cuidado, preocupate de cuidar al otro, piensa que uno no tiene idea de que maneras puede estar tocando las vidas de otros, sin darse cuenta, y procura que si tienes influencia, esta sea positiva!
Antes de despedirme, quiero agradecer todo el feedback que me han hecho llegar últimamente. No había tenido tiempo para ponerme al día con esto, así que quiero aprovechar de agradecer los saludos de Cristián Aguirre, de Valparaíso; de Israel Luna, Ciudad de México; de Gladys Pinacca de Argentina; de Marcela Carmona, de Chile; Oscar de Lucas, de Barcelona; Daniel Urdaneta de Maracaibo Venezuela, Kristina Holguin, ecuatoriana que vive en Tampa, FL; Paul Sandoval de Mexico; Diana Cabello de Mexico; Jean Ruiz de Mexico, Luis Tapia, Rafa Grimaldo, Ninoska, Javi, mi amiga Caro Rigol, Les Valdebenito, tambienTeddy Ramírez, de Mexico; Jesus Mercado, Mapi Martin y Leo Contla que son ya antiguos ruteros y contribuyentes de la Ruta, y muchos otros más que me han mandado su feedback y sus saludos ya sea al mail, via twitter, o a través de comentarios acá en el blog, hay muchos comentarios anónimos, así que no los puedo nombrar... Son tantos que estoy segura que se me van muchos nombres en ese momento. Gracias también a quienes han linkeado al blog de la Ruta desde sus propios blogs. No se imaginan lo importante que es para mi recibir sus mensajes, es lo que me anima a continuar con este proyecto. Les pido paciencia porque no he tenido la oportunidad de responder todos sus mails, pero lo voy a hacer, solo tenganme un poco de paciencia. Tal vez más adelante voy a hacer un episodio sólo con feedback de ustedes, podría ser para el episodio 100, que opinan? O si prefieren que en cada episodio, o tal vez una vez al mes, tengamos una sección para leer todos los saludos, recomendaciones y comentarios que ustedes envían? Cuéntenme que opinan, creo que sería una buena idea ya que me han mandado temas y preguntas muy buenos! Me pone muy contenta el pensar que entre todos construimos esta Ruta, y nos ayudamos mutuamente, compartiendo experiencias y sugerencias.

Bueno ahora sí ya me voy, cuéntenme que opinan.
La música de este podcast se llama sunshine y es de kevin mcleod.
Me despido, cuidense mucho un abrazo y buen viaje!

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jueves, 3 de diciembre de 2009

Ep 69: El Poder de la Música

Esta episodio es un poco diferente, hoy me las di de DJ. El tema es el poder de la música, en especial el poder para evocar y para modificar nuestros estados de ánimo. Cada persona tiene una relación más o menos estrecha con la música, pero en general es algo bastante omnipresente en nuestras vidas. En mi vida en particular, la música tiene un lugar muy importante.
Nunca termina de sorprenderme lo mucho que influye la música en los estados de ánimo y por lo mismo creo que es una herramienta que tenemos que aprender a utilizar para nuestro favor.


Para escuchar el audio de este episodio haz click sobre el título o aquí.


Cual es tu música para motivarte? Qué música te da energía para mover el cuerpo? Aunque no salgas a correr, si haces algún otro deporte, o simplemente necesitas ordenar tu casa?
Hay veces en que no tengo muchas ganas de hacer nada, tengo flojera y necesito reactivarme. En esas oportunidad escucho música que me levante, que me de energía para moverme. En general la música celta o irlandesa a mí me sube mucho el ánimo.


Me gusta mucho también escuchar mantras, no sólo para meditar, sino que cuando necesito relajarme, si les interesa les recomiendo todos los discos de Snatam Kaur, son espectaculares.
El punto es que la música tiene un poder inmenso para afectar nuestros estados de ánimo y por eso es una tremenda herramienta que podemos usar no sólo como compañía sino que para ayudarnos en nuestra vida diaria. Conoce cual es la música que te ayuda a activarte, tenla a mano y úsala cuando la necesites. Yo en las mañanas cuando voy camino al trabajo, en general uso la música que me activa. También conoce cuál es la música que te ayuda a relajarte, a calmarte, a bajar tus revoluciones y úsala cuando la necesites. 


Como les decía, la música es muy importante en mi vida, y hay tantas canciones que me hubiese gustado incluir acá, que hubiesemos estado un par de horas así que solo pude elegir algunas. Hace un tiempo me preguntaron, si tuviera que armar el soundtrack de mi vida, cuales serían las canciones que no podrían faltar, y la verdad es que me puse a armarlo en una carpeta en mi computador que ya tiene más de 100 canciones, porque siempre voy agregando nuevas. Me gustaría pedirles que compartan sus canciones, cuales canciones no pueden faltar en el soundtrack de tu vida? La vida es mucho mejor con música.
Por favor quienes quieran compartir sus canciones, háganlo acá a través del blog, así todos los demás podemos conocer nuevas canciones para incorporar en nuestros propio arsenal.
Bueno, llegamos al final de este episodio, un poco diferente, espero que les haya gustado.
Antes de despedirme les recuerdo las vías de comunicación: mail larutadelavida@gmail.com, comentarios acá en el blog www.larutadelavida.com, o twitter.com/larutadelavida


La música de este podcast se llama sunshine y es de kevin mcleod.


Ahora me despido, cuidense mucho, usen la música, un abrazo y buen viaje!

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lunes, 23 de noviembre de 2009

Ep 68: La Importancia de Saber Escuchar

El tema de hoy es algo que para mí ha sido uno de los aprendizajes más importantes de mi vida adulta. Y cada día sigo aprendiendo y practicando. Saber escuchar es una habilidad compleja, no es fácil, no es lo mismo oír que realmente escuchar. Es algo que tenemos que practicar para llegar a dominarlo.
Oir es inevitable, el oido es uno de nuestros sentidos, a diferencia de la vista que si cerramos los ojos la suspendemos, no podemos cerrar nuestros oidos. No podemos dejar de oir. Pero escuchar es un acto totalmente diferente, que se basa en el oír, pero que requiere de procesos de más alto nivel, requiere que involucremos nuestra conciencia, que dirijamos nuestra atención a lo que estamos escuchando, ya sea un ruido, un sonido, música o una persona hablando.
Sobre el escuchar, en una capa un poco más sofisticada aún se encuentra el interpretar lo que escuchamos, que requiere de un involucramiento mayor aún, ya que incorporamos otros factores a la ecuación, como el tono, la velocidad, el volumen e incluso la información proveniente de otro sentidos, principalmente la vista. En adelante, por simplicidad, nos vamos a referir con “escuchar” a estos dos últimos procesos, escuchar e interpretar, ya que están íntimamente relacionados y son los queremos desarrollar.



Por ejemplo, podemos oír algo que suena como una voz, podemos escuchar que alguien nos está diciendo: “Hola, me llamo Alejandra y soy la nueva supervisora”, y de acuerdo al volumen, al tono, a la velocidad, y muchos otros factores muchas veces inconscientes, podemos entender si Alejandra está contenta, nerviosa, tranquila, ansiosa, si es dominante, relajada, etc.
La importancia de saber escuchar radica en que es la única forma de conectar con otras personas, de comunicarnos efectivamente, de poder tener empatía, de aprender, de crecer, de colaborar, de construir, de relacionarnos, de crear confianza. Y también de que nos escuchen a nosotros.
Pero cómo saber si somos buenos escuchando? Yo creo que lo mejor que podemos hacer para responder esta pregunta es observarnos nosotros mismos en el acto de escuchar. Te distraes fácilmente? Cuando estás escuchando una clase, una conferencia, este podcast, una película, te ocurre que una sola palabra te hace volar a otro tema absolutamente diferente? Volar, recuerdo la primera vez que volé, tenía 10 años, era un viaje largo, 3 horas y media y viajaba sola. Me despedí en el aeropuerto de mis papás, mi mamá disimulaba una lágrima detrás de sus anteojos de sol, sol! Qué ganas de ir a la playa, hace cuanto tiempo que no voy? Mmmhh 3 semanas, no, 4! O son 5? Mmmmhhh.. Arena, sol, mar… perdón, en qué estábamos? Te pasa algo parecido, y cuando te das cuenta te has perdido 5, 10 minutos de la clase o conferencia? Ese es un signo de que te cuesta escuchar, de que te cuesta concentrarte.
Y durante una conversación, estas concentrado en el tema, pero mientras la otra persona está hablando, estás pensando en lo que vas a decir tú a continuación? No estás atento a lo que la otra persona está diciendo, sino que estás esperando tu turno, y preparando mentalmente tu próxima intervención. Eso, está demás decirlo, pero no es conversar, es solamente hablar por turnos. Peor aún que esto, es interrumpir! Eso demuestra que no solo no estabas escuchando sino que además ni siquiera respetas a la otra persona.
Hay un podcast muy bueno que yo escucho que se llama “The Look and Sound of Leadership”, lo hace Tom Henschel y es una vez cada dos semanas (obviamente en inglés), lo recomiendo a todo aquel que esté interesado en, como dice el mismo Tom, “ser percibido en el trabajo de la manera en que quiere ser percibido”.
Hace un tiempo el hizo un episodio sobre comunicación efectiva y si bien su orientación era específicamente hacia la comunicación en el trabajo, yo rescato bastantes cosas que pueden ser aplicadas en la vida diaria. Como por ejemplo, 7 cosas que un buen “escuchador” NO hace:
1) Interrumpir
2) Completar las oraciones del interlocutor
3) Igualar lo que la otra persona dice (“Oh, a mí me paso algo muy parecido, lo mío fue cuando yo estaba…”)
4) Dar sus ideas antes de escuchar las de la otra persona
5) Juzgar a la otra persona
6) Tratar de dar soluciones demasiado pronto
7) Contestar llamadas o aceptar interrupciones durante la conversación (sobretodo si fue acordada con anterioridad)
La idea es que nos observemos en nuestras interacciones con otras personas y detectemos cuales de estas cosas son malos hábitos que tenemos. El primer paso es ser conscientes de que los tenemos para luego ir eliminándolos poco a poco.
Por otro lado, Tom también da una lista de 23 cosas que un buen “escuchador” SI hace, pero yo voy a escoger solo 10 acá , que me parecieron las más importantes:
1) Indagar, pedir clarificación
2) Escuchar las emociones que no son expresadas verbalmente
3) Empatizar
4) Tomar con seriedad al interlocutor, no bajarle el perfil (No se debe decir, “no deberías preocuparte por eso”)
5) Identificar suposiciones ocultas
6) Dejar que la otra persona “se desahogue”
7) Pedir más detalles, hacer que la persona profundice en su explicación y dejar que el interlocutor cuente la historia a su manera
8) No permitir interrupciones
9) Preguntar como el interlocutor quiere ser ayudado
10) Mirar al interlocutor a los ojos
Este es el link al sitio web de The Look and Sound of Leadership. Yo sé que puede parecer demasiado agobiante el tener presente tantos aspectos que hay que cuidar a la hora de escuchar, pero con práctica y con paciencia no es tan difícil. Una vez que se va formando el hábito y pasa a ser casi transparente.
De todos modos, si yo tuviera que resumir cuales son para mí las claves de saber escuchar, para mí serían estas 3:
- Estar totalmente presente en la conversación: esto significa dejar en pausa cualquier otra cosa en la que hayamos estado pensando, y si nos distrajéramos durante la conversación volver rápidamente al presente; no ocuparse ni del pasado, ni del futuro, solo del momento presente.
- Foco en el interlocutor y en el tema que se está conversando: no en uno mismo, en qué digo para parecer inteligente, cómo le soluciono el problema a la otra persona, como hago que todo se arregle rápido.
- Parafrasear, preguntar y pedir detalles: chequear constantemente con el otro para asegurarnos de que estamos entendiendo bien, pedir clarificación cuando no estemos seguros de si entendimos bien y pedir detalles si encontramos que nos falta información.
Bueno, llegamos al final de este episodio, espero que les haya gustado y que se queden con la tarea de mejorar sus habilidades de escucha.
Les recuerdo las vías de comunicación: mail larutadelavida@gmail.com, blog www.larutadelavida.com, o twitter.com/larutadelavida


La música de este podcast se llama sunshine y es de kevin mcleod.


Ahora me despido, cuidense mucho, un abrazo y buen viaje!


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